La tertulia con Borja Villel.

Borja Villel durante su exposición junto con Carlos Jiménez y Marga Sánchez, ‏07 de febrero de 2010




Borja Villel con Juan Antonio Álvarez Reyes y Ferrán Barrembilit, ‏07 de febrero de 2010


Con un retraso que explica la semanita de órdago que vengo de padecer, hago la relatoria o el recuento de la sesión de la tertulia que tuvo lugar el pasado viernes 29 de enero en la galeria Distrito 4, a partir de las 20.30. Empiezo por la asistencia de los propios miembros de la tertulia - que fue muy nutrida - y continúo destacando entre los initados al artista Jose Manuel Ballester, a los criticos de arte Juan Antonio Álvarez Reyes y Dermis Leon y al director del C2M Ferrán Baremblit.Eso sin contar con el propio Manuel Borja Villel, quien llegó sobre las 21 horas y se excusó por la tardanza debida al alargamiento inesperado de una reunión de trabajo en el museo que dirige. Tambien estaban, obviamente, Marga e Isabel, las anfitrionas, y Antonio, que en estos días se ha incorporado a la plantilla de Distrito 4.
El coloquio, realizado en una de las salas de la galeria, lo inició tal y como estaba previsto el director del Reina. Él dijo en primer lugar que la suya sería una exposición informal que no habia preparado con antelacion y en la que intentaría hilar sus ideas y proyectos en torno al arte latinoamericano y su relación con el Reina Sofia. Afirmó que la presencia de dicho arte en las colecciones del mismo era insuficiente, pero que él no quería abordar esa insuficiencia desde el énfasis patrimonial que tradicionalmente ha marcado la orientación de los museos sino desde una perspectiva archivistica, entendida esta última desde el punto de vista elaborado y expuesto consistentemente por Jacques Derrida. Añadió que daba mucha importancia al establecimiento de relaciones dialógicas en la interlocucion con los sujetos del arte latinoamericano contemporaneo y puso como ejemplos de esa actitud de apertura y respeto al Otro el actual compromiso del museo con la Red de conceptualismos del Sur, que intenta pensar el arte latinoamericano sin someterse a conceptos y modelos historiográficos que, acuñados en Occidente, no son sin embargo los más apropiados para pensar las singularidades del arte de un continente que es en sí mismo muy complejo y singular. La doble exposicion de Mira Schendel y de Leon Ferrari ( abierta actualmente, en el Reina Sofia ) es un ejemplo muy claro- explicó- de artistas muy importantes y reconocidos cuya obra no se deja encasillar facilmente en esos conceptos y modelos historiograficos. Canónicos - en una palabra. En esa primera intervención puso el énfasisn tambien en dos muestras de arte que abrirán pronto sus puertas en el Reina. La primera está dedicada a la interpretacion de la modernidad realizada por un colectivo de arquitectos y artistas articulado en su dia por la legendaria escuela de arquitectura de la Universidad de Valparaiso, en Chile. Y la segunda, El Principio Potosí, que, comisariada por un colectivo de artistas centrados en Berlin, responde a la idea de que la modernidad no empezó con la Ilustracion, como suele pensarse, sino con el Descubrimiento y la conquista de América. Y concluyó ratificando su deseo de convertir al Reina Sofía, en el gran museo del Sur.
Borja Villel respondió despues a preguntas y comentarios hechos por Antonio Franco, Álvarez Reyes, Dermis Leon y Tomas Ochoa, que pusieron en cuestion asuntos que incluían la política de compras del Reina Sofía de arte latinoamericano, la relacion presuntamente conflictiva entre trabajos de investigación como el liderado por MariCármen Ramirez y los que adelanta la Red de conceptualismos del Sur y el papel del museo con respecto a la imposición de nombres, obras y tendencias por parte del mercado. La galerista Marga Sánchez llamó la atención, ademas, sobre la dificultad que supone considerar a América Latina como una unidad homogénea debido a las extraordinarias diferencias existentes entre los muchos países que la componen. Borja, a su turno, ilustró esa dificultad con su propia experiencia personal, marcada por su primer matrimonio con una ecuatoriana, que le permitió conocer directamente las enormes diferencias en el interior de un mismo pais relativamente pequeño como es Ecuador entre la selva amazónica, la sierra y la costa. Y yo llamé la atención sobre las aporias y las antinomias que han acechado y siguen acechando los proyectos de pensar desde America Latina prescindiendo de las conceptos y las categorias acuñadas en Occidente. En el nombre de Red de conceptualismos del Sur, dije, todo tiene un origen occidental, inclusive el concepto de Sur, como bien lo demostró Joaquín Torres García dibujando un mapa de América en el que el Polo Sur ocupa el lugar que en todos los mapas eurocéntricos ocupa el Polo Norte y la Patagonia está arriba y no abajo como suele estarlo en esos mismos mapas.
Al cabo de hora y media aproximadamente dimos por finalizado el coloquio y nos fuimos todos a tomar una copa, a degustar los espectaculares canapés preparados por Mareta Espinosa, con la ayuda de Ofelia y Antonio, y hablar distendidamente entre todos. Borja Villel se quedó con nosotros hasta la medianoche y los últimos de Filipinas salimos de la galeria junto con Marga Sánchez - nuestra generosa anfitriona Marga - cerca de las dos de la mañana. Mas temprano, en cualquier caso, que los que al alba terminaron tomando la última copa en casa de Natalia Granada.
En realidad fue una tertulia espléndida.